Nuestra realidad presente es Cristo. Vivimos en una libertad que nos conduce a la madurez. Es por esta razón que solamente manteniendo nuestra posición alcanzamos crecimiento y madurez. El alimento y gimnasio espiritual son la clave para la madurez.
¿Cómo crezco en carácter? Por medio de la vida espiritual. Llenos de los frutos de justicia por medio del Espíritu Santo. De modo que los demás vean que estamos progresando, teniendo cuidado de nuestra conducta. 1 Timoteo 4.15-16 NVI